Los de siempre
Imagina un llanto convertido en carcajada tras un abrazo que solo saben dar los de siempre. Una mirada cómplice con la que sobran las palabras. Una tarde de esas que hacen que te olvides del mundo. Un recuerdo de la infancia que no deja repetirse año tras año. Una bonita costumbre compartida. Una persona con la que crecer. Una amistad que te ha ayudado a forjar tu personalidad. ''Una mano que aparece al cruzar el pasillo a oscuras''. Un brazo que te agarra justo en el instante en el que vas a saltar al vacío. Una persona capaz de beberse océanos para que no te ahogues. No tener que contar qué te pasa. Y que lo sepan. Y que te entiendan. Imagina la palabra perfecta en el momento justo. Añadir velas a tu tarta y que siempre te vean soplarlas los mismos. Este mundo es ya bastante mierda como para que se acaben las pocas cosas bonitas que quedan en él.