No entendemos el valor de los momentos hasta que se convierten en recuerdos;

La vida es no querer tanto y querer mejor, saber que si algo quieres, algo te va a costar. Aprender que las personas importantes no se olvidan, se aprende a vivir sin ellas. Debemos aprender a aceptar lo que nos dan y esperar menos de los demás, así evitaremos decepciones. Tener en cuenta que cuando algo malo ocurre solo hay dos opciones: que te destruya o te fortalezca. Nos recordarán siempre lo que hicimos mal y ni una sola vez nos agradecerán lo que hemos hecho bien, pero supongo que la vida es eso, y lo único que hay que hacer es esperar lo mejor, prepararse para lo peor y aceptar lo que venga, y recordar que al final la vida se mide en hechos, no en días.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Nunca sabrás cual es el camino correcto si no arriesgas.

Forget forgot forgotten